El Pleno de Getafe ha aprobado inicialmente la nueva Ordenanza municipal de Convivencia con los votos a favor de PSOE, IUCM, PP y Cs, y el voto en contra de Ahora Getafe, que ha calificado la normativa como “profundamente reaccionaria”.
La concejala de Convivencia, Raquel Alcázar, ha manifestado que se trata de una aprobación inicial y que a partir de ahora comienza un periodo de alegaciones “para todos aquellos que crean que está mal redactada, que falta o sobra algo”.
Por su parte, la concejala del PP, Mirene Presas, ha asegurado que en Getafe existen problemas de convivencia en los barrios “y decir esto no es criminalizar a nadie sino ser consciente de una realidad, denunciarla y exigir al Gobierno que ponga solución a esta situación”.
A su juicio, corresponde al Gobierno “tomar cartas en el asunto para que los vecinos puedan disfrutar de una convivencia saludable”, por lo que esperan que este nuevo marco regulatorio “sea una herramienta al servicio del ciudadano para erradicar esas actitudes y comportamientos incívicos que repercuten en la salud y el bienestar de los vecinos”.
La nueva norma considera infracciones muy graves, con multas entre 1.500 y 3.000 euros, realizar actos de consumo por una colectividad indeterminada de personas, de cualquier tipo de comida o bebida, sea ésa alcohólica o no, en parques, jardines, plazas o vía pública, salvo en los lugares expresamente autorizados o, excepcionalmente, fuera de ellos con autorización municipal.
También sanciona la práctica de juegos en el espacio público y de competiciones deportivas masivas y espontáneas que perturben los legítimos derechos de los vecinos o de los demás usuarios del espacio público.
Además, se establece como una infracción muy grave solicitar, negociar o aceptar servicios sexuales retribuidos en espacios públicos, mantener relaciones sexuales en el espacio público y el acoso callejero.