El Ayuntamiento licita por más de 2 millones de euros la tala, poda, desbroce y control de enfermedades y plagas del arbolado

 

El Ayuntamiento de Getafe ha licitado por más de 2 millones de euros durante cuatro años el contrato de la tala y poda de árboles, desbroce y control de enfermedades y plagas, según ha adelantado El Periódico de Getafe.

Los trabajos comprenden los distintos tipos de poda, que serán definidos por técnicos del Servicio municipal de Parques y Jardines, para eliminar las ramas secas, moribundas, enfermas o afectadas por plagas, así como flores o frutos que contengan elementos alérgenos o tóxicos para el medio ambiente urbano.

También se encarga de eliminar las ramas que tapen señales de tráfico, semáforos o farolas, las que vuelen sobre tejados, corran peligro de desgarrarse por el viento o estén próximas a fachadas, ventanas, puertas y otros lugares de acceso.

Asimismo, la empresa tiene entre sus tareas la de trasplantar o en su caso talar los árboles que presenten un grave decaimiento fitosanitario, riesgo inminente de caída o incompatibilidad con la realización de obras de interés general. Igualmente, lleva a cabo desbroces de malezas, hierbas y pastos secos, para prevenir incendios durante la época estival, con maquinaria pesada como tractores y con herramientas ligeras como la desbrozadora de hilos, dependiendo de las condiciones del terreno.

En cuanto a los tratamientos fitosanitarios que se realizan en la masa vegetal, comprenden el control de plagas con insecticidas, incluyendo la retirada de nidos de procesionaria y bolsas de insectos, junto con el control de enfermedades y de malas hierbas, a través del uso de herbicidas.

Según figura en el expediente de contratación, “la finalidad de permanencia del arbolado en el ámbito urbano no siempre se puede cumplir, dado que por distintos motivos, como puede ser un grave decaimiento fitosanitario, riesgo inminente de caída del árbol, incompatibilidad con obras de interés general, etc., es necesario eliminar un árbol de su ubicación”.

Además, la aprobación de la Ley 8/2005, de 26 de diciembre, de Protección y Fomento del Arbolado Urbano de la Comunidad de Madrid, y sus sucesivas modificaciones, suponen que se prohíbe la tala de todos los árboles urbanos de más de 10 años o más de 20 cm de diámetro de tronco en su base.

Solamente en el caso de ser necesaria la construcción de infraestructuras o realización de obras incompatibles con la permanencia de un árbol, se debe efectuar su trasplante a otro lugar del municipio. En caso de no ser viable técnicamente el trasplante, se tiene que autorizar la tala por resolución del concejal correspondiente, con la obligación de una plantación compensatoria.

Serán apeados todos los árboles secos del municipio, de acuerdo con la relación que se facilite desde el Servicio de Parques y Jardines.