La empresa municipal de limpieza de Getafe (LYMA) ha adjudicado, mediante un procedimiento negociado sin publicidad, un contrato para adquirir 100.000 tarjetas que tendrán que utilizar los vecinos para medir los residuos que reciclan en los contenedores y bonificarse por ello en la nueva tasa de basuras que aplicará el Ayuntamiento en 2025.
La adjudicación del contrato ha sido por un importe de 242.000 euros e incluye el desarrollo, mantenimiento y gestión integral de estas tarjetas físicas vinculadas a una referencia catastral, lo que permitirá un control más eficiente de los recursos, facilitando el alta, baja y modificación de tarjetas, con las que se abrirán los contenedores de cerradura electrónica, unos 3.000, según el expediente al que ha tenido acceso EPG.
En el documento se señala que esto, no solo optimiza el tiempo de gestión, sino que también “reduce el riesgo de errores administrativos”, siendo necesario que cada domicilio cuente con una tarjeta física y que LYMA pueda analizar datos al respecto.
Además, al vincular a los ciudadanos empadronados en Getafe con el sistema de gestión de recogida de basura, se garantiza un acceso “más fácil y directo” a los servicios municipales, lo que fomenta la participación ciudadana y mejora la satisfacción de los usuarios al simplificar procesos “que antes podían ser engorrosos”.