El Hospital de Getafe atiende a unas 90 personas con TEA en sus dificultades de relación con el sistema sanitario
El Hospital de Getafe ha atendido a más de 90 personas con Trastorno del Espectro Autista (TEA) a través de un nuevo programa, creado en mayo de 2023, para minimizar las dificultades que presentan en su relación con el sistema sanitario.
Según han informado este martes desde el hospital en un comunicado, se trata de ofrecer una atención “óptima, integral e igualitaria, teniendo en cuenta las peculiaridades derivadas de la patología y lo que suponen en la relación con el ambiente sanitario-asistencial”.
Este programa AMI-TEA Getafe, dependiente del Servicio de Psiquiatría, trabaja para adaptar los circuitos, instalaciones y profesionales a estos pacientes de los que el 24% son mayores de 18 años y el 76% de tipo infantil y adolescente.
Los objetivos del programa son evaluar las necesidades médicas de las personas con TEA, coordinar y gestionar la atención médica especializada en el hospital, atender las comorbilidades médicas de estos pacientes y coordinar la atención con los servicios de Atención Primaria y Salud Mental que corresponden al paciente.
En este sentido, se han realizado 35 derivaciones a Salud Mental y 57 a otras especialidades entre las que destacan Oftalmología, Aparato Digestivo, Traumatología y Pediatría.
El equipo multidisciplinar de AMI-TEA Getafe, que está constituido por un psiquiatra y una enfermera especialista en Salud Mental, presta asimismo asistencia y apoyo en la relación entre la persona con TEA y su entorno y el medio sanitario facilitando la gestión de las citas, reduciendo los tiempos de espera y, si fuese necesario, realizando acompañamientos durante la atención clínica.
La consulta de Enfermería ha llevado a cabo casi 300 actuaciones, entre las que destacan las de gestión asistencial, así como las de confección del perfil individualizado del paciente.
PROTOCOLO DE DERIVACIÓN
La inclusión de un paciente en el programa se realiza mediante un protocolo de derivación que incluye un informe clínico donde conste el diagnóstico certero de TEA. Posteriormente, se establece la prioridad de atención y se gestiona la admisión y citación del paciente, evitando desplazamientos innecesarios.
La población con TEA suele presentar una serie de síntomas que pueden complicar su relación con el sistema sanitario, entre los cuales podemos encontrar dificultades de comunicación (ausencia o limitación del lenguaje oral y problemas en comunicación no verbal), dificultades en la interacción social, dificultades sensoriales, inflexibilidad y conductas repetitivas que limitan el funcionamiento en contextos no habituales.
También presentan discapacidad intelectual en un alto porcentaje de casos y limitaciones en la autonomía del cuidado personal que condicionan hábitos de vida no saludables.
AMI-TEA Getafe intenta minimizar estas dificultades a través de la individualización de la atención médica, aprendiendo a comprender a la persona para detectar sus necesidades y ofreciendo un apoyo adecuado y adaptado en cada momento.
Para ello, lleva a cabo medidas para la eliminación de barreras como la adecuación de los espacios físicos de consulta (insonorización y minimización de estímulos sensoriales), información con cartelería adaptada, la adaptación de los tiempos de espera y atención, la mejora de la comunicación con el paciente (instalación de pictogramas en colaboración con la Fundación Orange), la modificación de protocolos y procedimientos o el acompañamiento de la persona con TEA.