El Ayuntamiento de Getafe realizará un censo de palomas y un estudio de distribución de la población, así como de los factores que favorecen su proliferación, para evitar que aumenten en número mediante capturas con jaulas o redes.
Así, se adjudicará un contrato para el control y gestión de las poblaciones de palomas, que pueden suponer “una importante molestia para los ciudadanos por la suciedad que generan en fachadas y mobiliario urbano al acumularse las heces, las plumas y restos de nidificación”, según el expediente de licitación al que ha tenido acceso Europa Press.
También se considera necesario por “la corrosión de las estructuras metálicas y deterioro de ciertos materiales por el carácter ácido de sus excrementos, los ruidos que producen y la potencial transmisión de enfermedades”.
El objetivo de este contrato es evitar el incremento de su población que “puede llegar a ser un riesgo para la salud pública y una amenaza para el patrimonio municipal”, por lo que la empresa adjudicataria deberá realizar un diagnóstico de la situación inicial en la que se encuentran estas poblaciones, su emplazamiento y distribución.
En base al diagnóstico, se redactará un plan de actuación anual con las zonas de actuación prioritaria, cronograma o calendario de actuaciones, métodos de trabajo empleados y gestión posterior de los animales capturados.
Para la captura, el adjudicatario adoptará la técnica que resulte más idónea para cada situación y para el grupo de población de que se trate, para lo que contará con el personal técnico adecuado y con los medios necesarios, mediante jaulas de captura múltiple, redes (con puntos de cebado) o redes de activación automática, además de jaulas de mantenimiento.
En relación al tratamiento y gestión de los animales capturados, “se estará a lo dispuesto en las autorizaciones pertinentes, así como en la legislación sectorial de aplicación”.
La alcaldesa de Getafe, Sara Hernández, ha presentado este lunes las principales características de la Zona de Bajas Emisiones que se activará en septiembre en modo de aviso, comenzando a multar a partir del 1 de enero de 2025. La Zona de Bajas Emisiones comprende los barrios de Centro y San Isidro, formando un área de poco más de un kilómetro cuadrado, que está delimitada por la calle Ilustración, calle Madrid, avenida Juan de la Cierva, M-406, calle Ferrocarril y Paseo de la Estación, aunque estas vías no se verán afectadas. Los empadronados en esta zona podrán acceder con cualquier vehículo y para el resto tendrán restricciones los vehículos sin distintivo ambiental, mientras que no tendrán ninguna las etiquetas Cero y Eco, y deberán pedir una autorización temporal por un año los distintivos B y C, siempre que estén domiciliados en Getafe. Para controlar los perímetros habrá 80 cámaras y otras 40 en los exteriores, así como 40 dispositivos portátiles para la Policía local y una web