Vecinos residentes junto a una fundición en Getafe han pedido “un plan real” tras conocer que Getafe registró durante este mes 7 días de valores máximos horarios en NO2, y el pasado jueves se alcanzó el valor máximo de media diario en partículas contaminantes PM10 y PM2,5.
Desde la Plataforma de Afectados por Corrugados Getafe han manifestado que “son 7 días de este mes de contaminación disparada en Getafe y gran parte a causa del tráfico, pero hay otro foco del que nadie habla que es Corrugados y sus incumplimientos”.
“Las emisiones difusas de Corrugados también generan partículas PM10 y PM2,5 que en Getafe nos estamos tragando por la inacción del Ayuntamiento y de la Comunidad de Madrid”, han subrayado.
Además, han señalado que la contaminación “se acumula en la zona sur de Madrid por el tráfico, pero también por el cinturón industrial”.
Los afectados han recordado que se les prometió, con un documento firmado, que esta fundición de los 60 se trasladaría antes de levantar las viviendas del barrio de Los Molinos porque “era incompatible”, por lo que han agregado que ya no pueden más, “ni con el ruido, ni con el humo, ni los olores”.
Por su parte, la alcaldesa de Getafe, Sara Hernández, manifestó el pasado mes de octubre que la decisión de si Corrugados continúa con su actividad “depende única y exclusivamente de la Comunidad de Madrid, que en un escrito enviado al Ayuntamiento reconoce que la empresa no ha ejecutado en su totalidad el Plan de Minimización de Ruido y que el estudio acústico de la empresa es insuficiente, produciéndose ruidos especialmente en el lado colindante con las viviendas”.
Por lo tanto, Hernández considera que “tendrá que decidir la Comunidad de Madrid qué es lo que va a hacer, ya que la postura del Gobierno municipal es muy clara porque se han producido las circunstancias para una revisión exhaustiva, profunda y completamente restrictiva de la Autorización Ambiental Integrada para que sea perfectamente compatible el desarrollo de la actividad y la calidad de vida de los vecinos de la zona de Juan de la Cierva y de Los Molinos”.
La alcaldesa de Getafe, Sara Hernández, ha presentado este lunes las principales características de la Zona de Bajas Emisiones que se activará en septiembre en modo de aviso, comenzando a multar a partir del 1 de enero de 2025. La Zona de Bajas Emisiones comprende los barrios de Centro y San Isidro, formando un área de poco más de un kilómetro cuadrado, que está delimitada por la calle Ilustración, calle Madrid, avenida Juan de la Cierva, M-406, calle Ferrocarril y Paseo de la Estación, aunque estas vías no se verán afectadas. Los empadronados en esta zona podrán acceder con cualquier vehículo y para el resto tendrán restricciones los vehículos sin distintivo ambiental, mientras que no tendrán ninguna las etiquetas Cero y Eco, y deberán pedir una autorización temporal por un año los distintivos B y C, siempre que estén domiciliados en Getafe. Para controlar los perímetros habrá 80 cámaras y otras 40 en los exteriores, así como 40 dispositivos portátiles para la Policía local y una web