La empresa municipal de limpieza de Getafe (LYMA) ha retirado de las calles más de 1.000 toneladas de nieve en camiones bañera, que dejó el paso de la borrasca ‘Filomena’, según ha informado el Ayuntamiento en un comunicado.
Asimismo, han señalado que los trabajadores de LYMA han llevado a cabo más de 2.000 actuaciones entre los días 11 y 17 de enero, atendiendo unas 2.100 comunicaciones de vecinos por incidencias relacionadas con la nieve y el hielo, que llegaron a través de llamadas, correos electrónicos y la aplicación Gecor.
La alcaldesa, Sara Hernández, ha agradecido “el intenso esfuerzo” que han realizado los trabajadores de los servicios municipales, que “han estado trabajando sin descanso durante días para que Getafe recuperase la normalidad”.
“Les debemos mucho porque Getafe ha vuelto a demostrar que cuenta con excelentes profesionales capaces de enfrentarse a cualquier circunstancia adversa”, ha subrayado.
Además, ha destacado que “en un primer momento los trabajos en la calle priorizaron las medidas” para facilitar la retirada de vehículos atrapados, así como quitar la nieve de las vías principales, despejar pasos y vías peatonales, abrir accesos al centros prioritarios como el Hospital, centros de salud, polígonos industriales, farmacias, establecimientos de primera necesidad, centros educativos, puntos de contenedores o paradas de autobús.
También se han esparcido 870 toneladas de sal en toda la ciudad y se han limpiado más de 700 imbornales para garantizar el buen drenaje del agua, una vez derretida la nieve, a las alcantarillas, mientras que Parques y Jardines ha retirado unos 1.800 metros cúbicos de ramas de las calles, equivalentes a 40 camiones, de los 7.000 metros cúbicos que se ha calculado que existen en total.
CCOO
Sin embargo, desde la sección sindical de CCOO han alertado de la “falta” de recursos humanos y materiales del Ayuntamiento, que ha provocado que los vecinos de Getafe “han sufrido con más rigor” las consecuencias de la borrasca.
En su opinión, “ha vuelto a aflorar la falta de recursos materiales para poder teletrabajar y atender las necesidades de la población, debiendo ser suspendidas las actividades esenciales durante más de una semana tras estas inclemencias meteorológicas”.
En este sentido, han lamentado “sinceramente” que los vecinos de Getafe se encontrasen en esta situación, pero la plantilla municipal ha hecho “más de lo posible por ayudar a solventarla aunque con escasos recursos personales y materiales, y sin directrices claras en materia de prevención de riesgos laborales, tan necesarias cuando el número de accidentes laborales ha aumentado”.