El comité de apoyo a los 25 despedidos de LYMA se concentrará este sábado junto al polideportivo San Isidro
El objetivo de las movilizaciones es la readmisión de los despedidos, en cumplimiento de la moción aprobada en el Pleno del 13 de septiembre de 2017, la retirada de los expedientes y también de las acusaciones penales, ya que les piden varios años de prisión.
El Pleno aprobó entonces, con el voto en contra del Gobierno municipal, la reprobación del concejal de Limpieza, Ángel Muñoz, y la reversión del proceso de despido de los 25 trabajadores.
Sin embargo, el concejal de Limpieza aseguró durante su comparecencia que “se vendían facturas falsas en LYMA por entre 50 y 100 euros para cobrar las prestaciones sociales establecidas en el convenio”, por lo que se reafirmó en la decisión que tomó con los despidos.
Las prestaciones sociales atienden a necesidades de los empleados de LYMA, cónyuges e hijos para gafas, lentillas, aparatos auditivos, tratamiento dental o botas ortopédicas, entre otros.
Por su parte, la alcaldesa Sara Hernández ya manifestó en su día que “la realidad es que cualquier autoridad pública que sepa de la comisión de un delito tiene que ponerlo en conocimiento de la administración de Justicia, y eso es lo que hemos hecho”.
El comité de apoyo a los 25 despedidos de la empresa municipal de limpieza de Getafe (LYMA) ha convocado una concentración este sábado, de 19 a 22 horas, junto al antiguo polideportivo San Isidro, donde hoy comienza el Festival Cultura Inquieta, para apoyar a estos extrabajadores acusados de presentar facturas falsas para cobrar las ayudas sociales del convenio colectivo.
El objetivo de las movilizaciones es la readmisión de los despedidos, en cumplimiento de la moción aprobada en el Pleno del 13 de septiembre de 2017, la retirada de los expedientes y también de las acusaciones penales, ya que les piden varios años de prisión.
El Pleno aprobó entonces, con el voto en contra del Gobierno municipal, la reprobación del concejal de Limpieza, Ángel Muñoz, y la reversión del proceso de despido de los 25 trabajadores.
Sin embargo, el concejal de Limpieza aseguró durante su comparecencia que “se vendían facturas falsas en LYMA por entre 50 y 100 euros para cobrar las prestaciones sociales establecidas en el convenio”, por lo que se reafirmó en la decisión que tomó con los despidos.
Las prestaciones sociales atienden a necesidades de los empleados de LYMA, cónyuges e hijos para gafas, lentillas, aparatos auditivos, tratamiento dental o botas ortopédicas, entre otros.
Por su parte, la alcaldesa Sara Hernández ya manifestó en su día que “la realidad es que cualquier autoridad pública que sepa de la comisión de un delito tiene que ponerlo en conocimiento de la administración de Justicia, y eso es lo que hemos hecho”.