Patrimonio Municipal pierde uno de sus murales por un problema de humedades en viviendas de la plaza del Matadero
La Junta de Gobierno local ha aprobado este miércoles que pueda ser eliminado el mural, después de que una Inspección Técnica de Edificios determinara que las viviendas deben acometer obras de impermeabilización para acabar con las humedades que se están generando actualmente procedentes de la pared.
No obstante, la Delegación de Cultura tratará de recuperar lo antes posible este mural, que tiene más de 30 años, y que fue restaurado en 1999, junto con la dotación de las mejores condiciones a “la gran cantidad de murales existentes en la ciudad”.
Por ello, desde Cultura se está planificando un proyecto “mucho más ambicioso” para restaurar también todos aquellos murales históricos que hayan podido sufrir algún deterioro en los últimos años.
El área de Patrimonio ha solicitado, en cualquier caso, que los trabajos que se realicen, tienen que dejar obligatoriamente en condiciones adecuadas la fachada lateral para que posteriormente se pueda recuperar el mural.
Las obras en las viviendas son responsabilidad de la comunidad de propietarios del edificio, pero debían contar con la autorización del Ayuntamiento al ser necesaria la eliminación del mural, que forma parte del patrimonio municipal.
Por último, han señalado que, en este caso, ante la necesidad de habitabilidad de las viviendas, ha prevalecido “el derecho a una vivienda digna, tal y como habían solicitado los vecinos de estas casas”.
El patrimonio municipal de Getafe perderá un mural de 1986 situado en un edificio de la plaza del Matadero al tener que rehabilitar los vecinos la fachada por problemas de humedades en las viviendas.
No obstante, la Delegación de Cultura tratará de recuperar lo antes posible este mural, que tiene más de 30 años, y que fue restaurado en 1999, junto con la dotación de las mejores condiciones a “la gran cantidad de murales existentes en la ciudad”.
El área de Patrimonio ha solicitado, en cualquier caso, que los trabajos que se realicen, tienen que dejar obligatoriamente en condiciones adecuadas la fachada lateral para que posteriormente se pueda recuperar el mural.
Las obras en las viviendas son responsabilidad de la comunidad de propietarios del edificio, pero debían contar con la autorización del Ayuntamiento al ser necesaria la eliminación del mural, que forma parte del patrimonio municipal.
Por último, han señalado que, en este caso, ante la necesidad de habitabilidad de las viviendas, ha prevalecido “el derecho a una vivienda digna, tal y como habían solicitado los vecinos de estas casas”.