Mantenimiento de las instalaciones asociadas a las redes de saneamiento de Los Molinos por malos olores
Al respecto, la alcaldesa Sara Hernández ha asegurado que el origen de los olores lo provoca la falta de mantenimiento de las estaciones de bombeo de aguas pluviales gestionadas por el Consorcio de Los Molinos-Buenavista.
El contrato, que salió a concurso hace tres meses, tiene un presupuesto de licitación de unos 150.000 euros durante un año y engloba el mantenimiento de la estación de bombeo de aguas residuales, elementos auxiliares, arquetas aledañas de entrada y salida, tuberías de impulsión, el equipamiento electromecánico y obras civiles, entre otras instalaciones.
En la estación de bombeo de aguas residuales, la falta de pozo de gruesos y canales de desbaste genera atascos continuos en las seis bombas sumergibles, por lo que está prevista una limpieza quincenal o mensual, dependiendo del número de toallitas o elementos flotantes que lleguen al propio pozo de bombeo, ya que se introducen dentro del impulsor/rodete de las bombas sumergibles, atascándolo.
Los vecinos han denunciado que soportan olores pestilentes desde que viven en los Molinos, hace más de cinco años, sin que se haya solucionado en todo este tiempo.
El consorcio urbanístico Los Molinos-Buenavista, formado por el Ayuntamiento y la Comunidad de Madrid, ha licitado el mantenimiento de las instalaciones asociadas a las redes de saneamiento de Los Molinos ante los problemas de malos olores denunciados por los vecinos del barrio.
El contrato, que salió a concurso hace tres meses, tiene un presupuesto de licitación de unos 150.000 euros durante un año y engloba el mantenimiento de la estación de bombeo de aguas residuales, elementos auxiliares, arquetas aledañas de entrada y salida, tuberías de impulsión, el equipamiento electromecánico y obras civiles, entre otras instalaciones.
En la estación de bombeo de aguas residuales, la falta de pozo de gruesos y canales de desbaste genera atascos continuos en las seis bombas sumergibles, por lo que está prevista una limpieza quincenal o mensual, dependiendo del número de toallitas o elementos flotantes que lleguen al propio pozo de bombeo, ya que se introducen dentro del impulsor/rodete de las bombas sumergibles, atascándolo.
Los vecinos han denunciado que soportan olores pestilentes desde que viven en los Molinos, hace más de cinco años, sin que se haya solucionado en todo este tiempo.