El TSJM ordena devolver 5,1 millones a Ferrovial al no ser responsable de los desperfectos en Metrosur a su paso por Getafe
Ferrovial ha sostenido que las supuestas deficiencias de Metrosur no le son imputables, sino que se trata de defectos debidos a un deficiente mantenimiento, con base a que es un problema generalizado en toda la línea 12 de Metro, no solo en el tramo de Getafe que le fue adjudicado.
Según la sentencia, conforme a lo establecido en el contrato hay un control obligatorio de calidad que certificaba que los materiales empleados tenían las características previstas en el proyecto, pudiendo, además, la dirección de la obra ordenar la apertura de calas si se sospecha de la existencia de vicios ocultos en la construcción o el empleo de materiales de calidad deficiente.
Además, existía una dirección de obra que supervisaba la correcta ejecución de los trabajos y cuyas instrucciones eran de obligado cumplimiento por el contratista, por lo que si los defectos de la construcción se han producido durante la ejecución de la obra, hay que llegar a la conclusión de la existencia de una deficiente vigilancia e inspección por los técnicos que dirigían los trabajos.
De esta forma, el TSJM da la razón a la empresa Ferrovial Agroman SA que presentó un recurso contencioso administrativo contra la Orden de la Consejería de Transporte, Infraestructuras y Viviendas de la Comunidad de Madrid, de 21 de abril de 2015, por la que se declaraba la existencia de vicios ocultos en varios tramos de Metrosur, de más de 7 kilómetros de longitud a su paso por Getafe, por lo que tuvo que pagar más de 5 millones de euros para el arreglo de las deficiencias.
La cuestión que se planteaba en el presente recurso contencioso administrativo estribaba en determinar si los defectos constructivos, cuya reparación se exigía a Ferrovial, merecían la calificación de vicios ocultos ruinógenos.
El Tribunal Superior de Justicia de Madrid ha ordenado devolver a Ferrovial 5,1 millones de euros que pagó a la Comunidad de Madrid al considerar que no hubo “vicios ocultos ruinógenos” en los desperfectos existentes en las obras de construcción del Metrosur a su paso por Getafe.
Según la sentencia, conforme a lo establecido en el contrato hay un control obligatorio de calidad que certificaba que los materiales empleados tenían las características previstas en el proyecto, pudiendo, además, la dirección de la obra ordenar la apertura de calas si se sospecha de la existencia de vicios ocultos en la construcción o el empleo de materiales de calidad deficiente.
De esta forma, el TSJM da la razón a la empresa Ferrovial Agroman SA que presentó un recurso contencioso administrativo contra la Orden de la Consejería de Transporte, Infraestructuras y Viviendas de la Comunidad de Madrid, de 21 de abril de 2015, por la que se declaraba la existencia de vicios ocultos en varios tramos de Metrosur, de más de 7 kilómetros de longitud a su paso por Getafe, por lo que tuvo que pagar más de 5 millones de euros para el arreglo de las deficiencias.